La regla de las dos pizzas de Jeff Bezos que llevó a Amazon a donde está: una de las empresas más valiosas del mundo
La productividad es un aspecto crucial para toda empresa o negocio, ya que es uno de los principales factores para conseguir el éxito. Para grandes empresas con miles de empleados, este requisito es fundamental si quieren tener beneficios y ser exitosos con sus tareas, y por esa razón Jeff Bezos ideó una técnica para conseguir la productividad en Amazon. Hay pocas dudas de que Jeff Bezos tiene una de las mejores mentes para los negocios de nuestro siglo, y los millones de usuarios que cada día navegan por Amazon y realizan compras lo avalan. Pero tener una gran idea no es el único motivo por el que es una de las cinco personas más ricas del mundo, según Forbes, sino que hay que saber gestionar la empresa y los cientos de equipos que conforman todo el conglomerado de Amazon. La magnitud de las operaciones de Amazon en inmensa, lo que por un lado requiere que Bezos tenga que delegar, pero al mismo tiempo como CEO debe controlar lo que ocurre en su empresa y por lo tanto al día tiene varias reuniones. Con el tiempo Bezos descifro las claves para tener reuniones productivas y no perder su tiempo, que debido a que Amazon es una de las empresas más valiosas del mundo, vale oro.
Por ello encontró la forma de hacer que cada reunión fuera productiva, y acabó con sesiones interminables donde los jefes comentan durante demasiado tiempo cosas sin importancia, para luego resolver la problemática en dos minutos al final. Muchos señalan esta regla como una de las claves del éxito de Amazon, y el motivo por el que actualmente Amazon es una de las empresas más valiosas que existen. Lo primero de todo es que para Bezos no es necesario reunirse todos los días, ya que por norma general esto es un pérdida de tiempo, pero ya no solo se centra en el número de horas que hay que pasarse reunidos, sino también en el número de personas que tiene que estar presente. La regla de las dos pizzas, se basa en el principio de que a las reuniones tan solo tiene que acudir como máximo el mismo número de personas al que puedan alimentar adecuadamente dos pizzas. Esta idea fomenta los equipos más pequeños, con el objetivo de ser más ágiles, tener una mejor comunicación y tomar decisiones con mayor velocidad, lo que ayuda e incrementa exponencialmente la productividad. En poco tiempo esta regla se popularizó mucho en el entorno empresarial, aunque es cierto que el tamaño de un grupo no siempre determina el éxito de una operación, y como señala también Bezos, contar con un líder capaz y resolutivo suele ser incluso más determinante.